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Ventajas y desventajas de ser un dentista
Los dentistas tratan pacientes que sufren de males de los dientes, encías y boca, y también proporcionan cuidado oral preventivo. Los dentistas son profesionales muy habilidosos que completan una educación, capacitación y una licenciaturas extensivas requeridas para practicar. Ser un dentista ofrece muchas ventajas y desventajas.
Ser tu propio jefe
De acuerdo con careerplanner.com, tres de cada cuatro dentistas trabajan en la práctica privada, por lo que tienen la oportunidad de ser sus propios jefes. Pueden contratar a su propio personal, establecer las horas laborales para el consultorio y limitar el tamaño del consultorio, si así lo desean. Los dentistas también tienen la opción de especializarse en un área de interés, como ortodoncia o cirugía oral.
Ayudar a las personas
Otra ventaja de ser un dentista es la satisfacción que viene de ayudar a las personas. Los pacientes que tienen mucho dolor pueden encontrar alivio y ser capaces de comer con normalidad nuevamente. Los dentistas también pueden ayudar a los pacientes a mejorar su apariencia con tratamientos de ortodoncia o blanqueamientos. Las visitas regulares al dentista pueden acabar con los problemas potenciales, como las caries y la enfermedad periodontal.
Ingreso sustancial y buenas perspectivas laborales
Los dentistas tienen la ventaja de ganar un ingreso sustancial. De acuerdo con careerplanner.com, el salario anual medio para los dentistas en Estados Unidos fue de US$136.960 para mayo del 2006. Las futuras perspectivas laborales para los dentistas también son buenas, ya que los nuevos dentistas necesitarán reemplazar a los que se jubilen.
Dificultad para ser un dentista
Una desventaja de ser un dentista es que puede ser un camino largo y difícil llegar a serlo. Los futuros dentistas deben completar cuatro años de facultad y después ser admitidos a una escuela dental para otros cuatro años de estudios. Después de completar sus estudios, la mayoría de los dentistas reciben un título de Doctor en Cirugía Dental (DDS, siglas en inglés). Los estados obligan a los dentistas a tener una licencia, lo que involucra aprobar exámenes escritos y prácticos.
Tratar con pacientes aprehensivos
Otra desventaja es que muchas personas se sienten incómodas, o incluso temerosas, de ir al dentista, especialmente los niños. Los dentistas deben tratar a personas que no siempre son cooperativas y necesitan una reafirmación constante durante un procedimiento dental. Deben ser capaces de permanecer la calma y el profesionalismo durante estos tiempos que suelen ser difíciles.