Tipos de contratos de proyecto

Si necesita construir algo, como una casa, oficina, granero o almacén, puedes contratar a un contratista para manejar el proyecto y él se encargará de la construcción. Tu y el contratista entran en un acuerdo o un contrato de proyecto, que explica en detalle lo que vas a pagar, cuánto vas a pagar y cuánto el contratista va a ganar por su parte del trabajo. Tu y el contratista son libres de negociar cualquier acuerdo que mejor se adapte a tu proyecto específico. Sin embargo, los tipos más comunes de contratos del proyecto incluyen; a tanto alzado o de precio fijo, precio máximo garantizado, además de los costos, y el precio por unidad o el precio unitario.

El contrato de obras a tanto alzado, también conocido comúnmente como un contrato de precio fijo, es el más sencillo de entender. Tu y el contratista acuerdan un precio fijo y pagas ese precio por mucho que el proyecto termine costando. Ejemplo: Contratas a un contratista para construir tu casa por US$300.000. Si la construcción termina costando US$215.000, el contratista mantiene la diferencia de US$85.000 como beneficio adicional. Sin embargo, si el proyecto cuesta US$345.000, entonces el contratista sufre una pérdida de US$45,000, ya que tu pagas la cifra acordada de US$300.000.

El contrato del proyecto precio máximo garantizado establece un límite en la cantidad que te comprometes a pagar al contratista. Si el proyecto cuesta menos, pagas menos. Si el proyecto cuesta más, pagas el máximo precio acordado y el contratista sufre la pérdida del exceso.

Ejemplo: Contratas a un contratista para construir una casa por el precio máximo de US$300.000. Si la casa cuesta sólo US$215,000, pagas US$215,000. Pero si el proyecto cuesta US$345.000, todavía pagas sólo US$300.000, y el contratista deberá pagar el exceso de US$45,000 como una pérdida.

En el contrato de costo más el proyecto, te comprometes a pagar el costo real del proyecto, además de una cantidad fija de lucro para el contratista. Ejemplo: Contratas a un contratista para construir una casa por el costo real, y también te comprometes a pagar al contratista una cantidad igual al 10 por ciento de ese costo real. Si construir tu casa cuesta US$300.000, le pagarás al contratista otros US$30.000, haciendo que el precio total sea de US$330.000. Alternativamente, puedes acceder a pagar los costos reales más un honorario fijo especificado por el contratista. Por ejemplo, si construir tu casa cuesta US$300.000 y acordaste pagar al contratista US$ 20,000, los costos totales serían de US$320,000.

Con este contrato, te comprometes a pagar una cierta cantidad de una unidad específica de la construcción. Por ejemplo, puedes acceder a pagar una cierta cantidad por metro cuadrado de todo el proyecto. O puedes pagar una cierta cantidad para cada parte del proyecto, como marcos, electricidad, plomería, techos y terminación del trabajo. De esta forma, si a la mitad del proyecto decides que deseas duplicar los metros cuadrados de una casa u oficina, puedes hacerlo, por supuesto, sólo te costará un adicional del monto indicado.

Ejemplo: Contratas a un contratista para construir una casa por US$70 por pie cuadrado. ¿Quieres 2,000 pies cuadrados? Tendrás que pagar un total de US$140.000. Alternativamente, puedes estar de acuerdo en pagar US$4 por pie cuadrado para enmarcar, US$3 por pie cuadrado para el cableado eléctrico y la fontanería, y US$2 por pie cuadrado para la pintura y el trabajo de terminación.

Los contratos de los proyectos descritos en este artículo no son tus limitaciones, sino que simplemente ofrecen algunos ejemplos de cómo habitualmente se construyen proyectos. Tu y el contratista deben negociar cualquier acuerdo que mejor se adapte a tu proyecto y tu relación. Se podrán incluir elementos de dos o más de los contratos descritos en este artículo, o podría ser algo completamente diferente. El punto es que eres libre de negociar cualquier contrato que quieras, y debes usar estos como ejemplos, no restricciones.