Cómo retirar dinero de un cajero automático (ATM)

ATM o corresponde a las iniciales en inglés de “Automatic Teller Machine” o Cajero Automático. Los primeros cajeros automáticos que tuvieron éxito fueron instalados en Estados Unidos desde 1969, inicialmente concebidos como máquinas dispensadoras de efectivo.

El primer cajero automático del que se tiene registros, según smithsonianmag.com se instaló en Londres a las afueras del Baco Barclays en junio de 1967. Para entonces varios grupos de ingeniería y sistemas contratados por la banca tanto en Asia como Europa trataban de automatizar el proceso de retiro de efectivo por taquilla.

A su llegada los ATM fueron toda una revolución, cambiaron la banca en formas que hoy damos por hecho. El 2 de septiembre de 1969 aparecen en Nueva York los primeros cajeros automáticos operados por Chemical Bank. La campaña publicitaria de entonces fue: “El 2 de septiembre, nuestros bancos abrirán a las 9 a.m. y nunca más cerrarán".

No negamos el hecho de que los ATM son todo un hito en cuanto a conveniencia y disponibilidad de efectivo. Solamente percatamos la importancia de los ATM cuando no encontramos uno cerca.

Aunque las transacciones electrónicas van en aumento desde las últimas décadas en una era digital, el efectivo no parece pasar de moda y es posible encontrar un cajero automático siempre disponible muy cerca de nosotros.

Hoy gozamos de las ventajas de un ATM en la modalidad “multifunción” con pantalla táctil de alta definición y sistemas biométricos para reconocimiento de nuestra huella dactilar.

Hagamos un repaso de cómo sacar dinero de un cajero.

No dejes de leer: ¿Cómo funcionan los cajeros automáticos?

Los cajeros automáticos (ATM) son verdaderas sucursales bancarias electrónicas que permiten a las personas acceder a su cuenta bancaria y realizar transacciones básicas como depósito o retiro de efectivo con o sin tarjeta de débito o crédito, sin necesidad de visitar la taquilla del banco.

Los menús y las características pueden variar ligeramente entre cajeros automáticos, dependiendo del banco, el tipo de ATM y si es una unidad más antigua o más reciente. El retiro de efectivo es una función fácil de realizar junto a la consulta de saldo, son las funciones más básicas de todos los cajeros automáticos.

Los cajeros automáticos multifuncionales de hoy en día permiten opciones más complejas como transferir fondos, depositar efectivo e incluso depositar cheques.

Si nunca has usado un cajero automático, familiarízate con los procesos más simples antes de usar sus múltiples funciones, haciendo que el proceso sea rápido y simple.

Inserta tu tarjeta de débito o crédito en la ranura designada. Asegúrate de que la tarjeta esté orientada correctamente cuando la introduzcas. Los cajeros automáticos tienen por lo general un cuadro o ilustración que te indica cómo posicionar tu tarjeta.

Selecciona un idioma. Las opciones de idioma por lo general incluyen inglés y español, pero algunos cajeros pueden proporcionar opciones de idioma adicionales.

Ingresa tu número de identificación personal o PIN, que normalmente contiene cuatro dígitos que tú estableciste o que te asignó tu banco cuando abriste tu cuenta.

El PIN es una medida de seguridad que previene que otros utilicen tu tarjeta o accedan a tu cuenta, así que memoriza tu PIN y por ningún motivo lo escribas en el reverso de tu tarjeta o en algún lugar visible.

Selecciona "Retirar" cuando el cajero automático te pida que elijas el tipo de operación que deseas realizar. Las otras opciones de transacción que verás en pantalla te permiten consultar saldo, pedir el estado de cuenta, hacer un depósito o transferir dinero entre cuentas, la variedad de funciones dependerá del tipo de ATM que usas y si es operado por el banco del cual eres cliente o no.

Selecciona la cuenta de la que deseas retirar dinero. Por ejemplo, si tienes una cuenta de cheques y una de ahorros, pero quieres retirar fondos de tu cuenta de cheques, selecciona "Cuenta de cheques." Esta opción solo aparecerá si tienes varias cuentas.

Elige la cantidad de dinero que deseas retirar. Las opciones suelen incluir USD 20, USD 40, USD 60, USD 80, USD 100 y USD 120. Algunos cajeros automáticos pueden variar los montos mínimos y máximos. Los bancos también imponen límites diarios de retiro de efectivo por cajeros automáticos, así que asegúrate de conocer los límites diarios antes de retirar dinero en efectivo en un cajero automático.

Toma tu dinero y espera a que se imprima el recibo y la tarjeta sea devuelta o liberada del ATM. La mayoría de los cajeros automáticos imprimirán el recibo automáticamente, pero si un cajero te pide que selecciones si deseas o no imprimir el recibo, selecciona la opción de tu predilección. Sé consciente con el ambiente, evalúa que tan necesario es para ti el recibo y si eliges imprimirlo no lo tires a la basura en el lugar del ATM.

Utiliza un cajero automático operado por tu banco siempre que sea posible. Las transacciones realizadas a través de un cajero automático operado por el banco en el cual posees tus cuentas son gratis, pero las operaciones realizadas en un ATM de la competencia te costarán una pequeña tarifa, por lo general, alrededor de USD 2.

Antes de insertar tu tarjeta, asegúrate que el ATM se encuentra funcional. Nunca uses un cajero automático que parece inusual o que te da opciones que no conoces.

Para retirar dinero de forma segura de un cajero automático, usa un ATM ubicado en un área pública, bien iluminado, presta atención a tu entorno durante el proceso. Al salir, asegúrate de que nadie te sigue, no confíes en nadie que trate de ayudarte con tu transacción y no cuentes el dinero en el lugar de la máquina.