Reglas sobre los impuestos al inventario de mercadería

Administrar un inventario de mercadería es parte esencial para llevar adelante un negocio, equilibrando la demanda actual y futura de los clientes con la habilidad del negocio de producir o comprar bienes para su re-venta. Un factor que afecta cómo las empresas manejan sus inventarios es el impuesto al inventario de mercadería, que impone una carga impositiva mayor en las empresas con inventarios valiosos grandes.

Una forma de impuesto al inventario de mercadería es un impuesto local o estatal a la propiedad. Este es similar al impuesto que un municipio local le impone a los contribuyentes individuales basándose en el valor de su propiedad inmobiliaria personal. En los estados con impuestos a la propiedad de inventarios de mercadería, el gobierno cobra un porcentaje del valor de inventario de una empresa. Este impuesto sólo se aplica a ciertos tipos de mercadería, como propiedades desocupadas, automóviles, botes y vehículos recreativos. No se aplica a otros bienes para el consumidor más pequeños que una empresa tiene en su inventario.

El gobierno federal también requiere que las empresas declaren los cambios en los valores de sus inventarios para calcular los impuestos al ingreso de las empresas. Si la producción, compra o venta de mercadería le genera ingresos a una empresa, esta debe declarar sus ganancias. En la contabilidad empresaria, el inventario de mercadería cuenta como un activo tangible en el balance general de la compañía. Las ganancias en el valor de los inventarios de mercadería de un año fiscal al siguiente incurren en impuestos más altos, que la empresa debe pagar como parte de su impuesto al ingreso anual al IRS.

Para ambos tipos de impuestos al inventario de mercadería, el valor del inventario de una empresa determina la cantidad de los impuestos que adeuda. Esto requiere una evaluación del valor de inventario basado en los lineamientos estandarizados. En los estados con impuestos a la propiedad de inventarios, un tasador asignado por el estado determina el valor basado en lo que un nuevo propietario pagaría por el inventario para continuar con el negocio, que es diferente del precio de venta al por mayor y del precio minorista. Para el impuesto federal al ingreso, una empresa debe determinar el valor de su propio inventario usando un método de costo (lo que el inventario le cuesta a la empresa para adquirirlo o producirlo) o un método de mercado (el valor del mercado para el inventario en un momento dado).

Los impuestos al inventario de mercadería tienen varios efectos en las empresas y gobiernos. Además de la ganancia que los gobiernos reúnen en impuestos al inventario de mercadería, que sirven para financiar diferentes programas gubernamentales, los gobiernos también pueden usar sus políticas impositivas para inventarios como herramientas para desarrollar políticas fiscales. Por ejemplo, un estado podría bajar el impuesto al inventario de mercadería para facilitar la carga impositiva de las empresas locales y alentar el aumento del trabajo, esperando que las empresas utilicen el dinero que ahorran en impuestos a la propiedad para contratar a nuevos trabajadores. Las empresas podrían también elegir liquidar su inventario, a veces a precios reducidos, en momentos específicos del año fiscal para reducir el valor de un inventario justo antes de la tasación.