Dónde se registran las patentes en el balance

Una patente es un derecho de propiedad que le da a su titular la facultad exclusiva de utilizar un invento, diseñar o procesar propiedad intelectual. La Oficina de Marcas y Patentes de los Estados Unidos analiza las solicitudes de patente y las otorga, brindándoles a las personas físicas o jurídicas un monopolio efectivo de los derechos durante determinada cantidad de años. Las patentes se registran en la sección de bienes intangibles del balance.

Los bienes intangibles son parte de la sección de bienes a largo plazo del balance. Incluyen patentes, obras protegidas por derechos de autor, marcas, franquicias, fondos de comercio y otros elementos no físicos que no tienen un valor de mercado fácil de determinar. Sin embargo, las compañías utilizan bienes intangibles para generar beneficios económicos a largo plazo. Por ejemplo, una compañía de semiconductores puede otorgar licencias por sus patentes a los fabricantes, generando un flujo de dinero estable a lo largo de la duración de la patente. Los activos intangibles son bienes a largo plazo, porque las compañías los utilizan durante mucho tiempo y no se pueden convertir en efectivo fácilmente.

El proceso contable para las patentes es similar al de otros activos fijos. Las compañías adjudican y amortizan los costos a lo largo de la vida útil de la patente. Los costos incluyen el registro, la documentación y las costas legales derivadas de defenderla contra el uso no autorizado. Los costos de investigación y desarrollo no se consideran, porque son parte del gasto operativo. Las compañías deben utilizar el método de línea recta para amortizar las patentes y otros activos intangibles, en los que el gasto de amortización es el mismo cada año. Por ejemplo, si la compañía adquiere una patente a 15 años por US$1 millón, el gasto anual de amortización de línea recta será de alrededor de US$67.000.

Las compañías debitan el gasto de amortización y acreditan la amortización acumulada para registrar la de los costos. La acumulada es una contracuenta que reduce el valor de las patentes en la sección de activos intangibles del balance. Para seguir con el ejemplo anterior, el valor de registro de la patente luego de un año es US$933.000 (1 millón - 67.000). Las compañías pueden registrar la amortización directamente en la cuenta de la patente en lugar de utilizar una contracuenta separada, en cuyo caso deben debitar el gasto de amortización y acreditar en la cuenta de la patente.

La valuación de la patente puede surgir de un proceso de diligencia por la venta o fusión de una compañía. En un artículo que se publicó en noviembre del 2004, el contador público certificado J. Timothy Cromley sugiere un proceso de pasos múltiples para valuar las patentes. Estos pasos incluyen la verificación de que siga vigente, la lectura de la documentación de solicitud de la patente y el cálculo del valor actual del flujo de efectivo futuro.

Las entradas de cargos aumentan las cuentas de activos, como las patentes, y las cuentas de gastos, como los de amortización. Los débitos disminuyen las ganancias, las obligaciones y las cuentas de participación de los accionistas. Los saldos a favor disminuyen las cuentas de activos y gastos, y aumentan las ganancias, obligaciones y participaciones de los accionistas. Además, aumentan las contracuentas de activos, como depreciación y amortización acumuladas, que reducen el valor de registro de los activos tangibles e intangibles respectivamente.