Presupuesto estático vs. presupuesto flexible

Los presupuestos estáticos y flexibles son dos partes separadas pero interconectadas de un régimen contable sólido dentro de un negocio. Por esto en el presente post hablaremos del presupuesto estático vs presupuesto flexible, para tener así, un mayor conocimiento de sus diferencias.

Los presupuestos estáticos por una parte, son una buena manera de mantener un seguimiento de los costos de producción, y motivar al personal a cargo de las compras en conseguir los bienes requeridos al menor precio posible.

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Un presupuesto flexible justifica en algunos casos el presupuesto completo de una compañía. Sin embargo, es mejor si se utiliza como parte de un presupuesto general más amplio en un papel de subdivisión, como por ejemplo, en una cuenta variable de gastos.

Un presupuesto estático es generalmente utilizado como herramienta de proyección para estimar los gastos de un negocio o proyecto dentro de un periodo estipulado.

Por otra parte, todo tipo de discrepancia que resulte del costo fluctuante de materias primas o errores en la elaboración inicial del presupuesto. Aparecen en el mismo como variantes del presupuesto estático.

Cuando contabilices el final de los gastos reales de un ciclo de producción, estás variantes del presupuesto deben ser combinadas con el presupuesto estático real inicial.

De esta forma se logra obtener un reporte financiero correcto. Haciendo que ver un presupuesto estático como un presupuesto de proyección, sirva de gran ayuda en la suma final de tu futura inversión.

Al momento de elaborar un presupuesto para determinada actividad. Los presupuestos de tipo flexible son una opción eficaz y ventajosa, los mismos permiten un ajuste entre el presupuesto estimado por la empresa y los costos existentes en el mercado actual.

Su misión principal, está centrada en anticipar todo tipo de variación que pueda surgir dentro de los ingresos obtenidos por ventas. De esta manera se podrá conocer qué tipo de cambios aplicar en los volúmenes de producción y con esto ahorrar y reducir los gastos.

Una regla básica sobre los presupuestos flexibles es que son una herramienta de análisis del ciclo comercial y no pueden ser recabados antes del final del ciclo comercial en sí mismo.

Analizar el presupuesto flexible al final del ciclo comercial, ayuda a la administración a ajustar los pronósticos del presupuesto estático del siguiente ciclo.

De esta forma podrá coincidir con las circunstancias cambiantes presentes en los gastos de operación.

En pocas palabras, un presupuesto flexible puede ser descrito como una contabilidad de gastos reales al final de un periodo. Esto hace que funcione como herramienta para hacer una comparación con el presupuesto estático original.

Suele surgir la incógnita de qué tipo de presupuesto emplear, pero la verdad es que la mayoría de los negocios deberían utilizar tanto presupuestos flexibles como estáticos durante el transcurso de sus operaciones comerciales. La única excepción recomendada es durante un ciclo contable.

En estos casos, la compañía logra adherirse estrictamente al presupuesto estático original. Es decir que en este tipo de situaciones las estadísticas reales contenidas en los presupuestos estático y flexible serían iguales.

Los comercios que no dan seguimiento de forma correcta a los constantes cambios en los gastos, en comparación al presupuesto estático inicial. Tienen dificultades en reportar correctamente sus ganancias reales, lo cual puede llevar a implicaciones legales negativas en el futuro.

Las compañías también tienen interés en proveer información precisa a los accionistas. Para que de esta manera, puedan administrar correctamente sus carteras de valores y ajustar sus expectativas de dividendos en consecuencia.

El cambio en el presupuesto estático suele subdividirse en un cambio del presupuesto flexible. Entre los datos para calcular dichos cambios podemos encontrar:

La variación entre los resultados reales y el monto que corresponde al presupuesto flexible. Así como el cambio en el número de ventas.

Por otra parte está, la variedad entre las cantidades de los montos del presupuesto flexible y la cantidad del monto que corresponde al presupuesto estático.

El proceso por el cual se comparan los niveles del desempeño en las elaboraciones de los servicios y productos, se denomina benchmarking.

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El mismo funciona como un afianzamiento de los estándares de comparación. Ayudando así a ejecutar mejoras en los niveles de desempeño de una empresa, comparándola con otras compañías.

Es decir que dichos estándares calculan de forma precisa el desempeño de una empresa, pero además también evalúa el desempeño de sus gerentes y trabajadores.