Cómo instalar una estufa a gas

Instalar una estufa a gas es fácil de hacer, pero hay que prestar mucha atención al detalle. Si se pasan por alto algunos pasos importantes, el hogar se podría llenar rápidamente con gas, que es tóxico para los seres humanos y animales y podría explotar muy fácilmente con la más mínima chispa de electricidad. Estos pasos te mostrarán cómo instalar una estufa a gas para que sea segura para uso prolongado por los próximos años.

Localiza la línea de gas en la habitación. En algunos hogares, la línea de gas será una manguera corrugada saliendo de la pared con una válvula de cierre. En otras casas, podría verse como un tubo con una tapa y una válvula. Si no puedes encontrar una línea de gas en la habitación que deseas poner la estufa, no intentes instalar una tú mismo. Este es un trabajo para profesionales.

Asegúrate de que está cerrada la válvula de línea y retira la tapa, si hay una. La mayoría se aflojan usando una llave inglesa.

Prueba si la línea de estufa se ajustará a la línea de gas atornillándolas juntas. Algunas estufas necesitan dispositivos especiales para hacerlas compatibles con algunas líneas de gas. Estos se pueden conseguir normalmente en una ferretería.

Desatornilla la línea de gas y la línea de la estufa. Envuelve el final de la manguera macho con una suave capa de cinta de tubo de teflón.

Atornilla la manguera macho a la hembra

Ajústala con una llave inglesa.

Mezcla una taza de agua con una cucharada de detergente para lavar los platos y enciende el gas poniendo la válvula en posición abierto".

Cepilla la mezcla por toda el área donde están conectados los dos tubos. Si la mezcla empieza a hacer burbujas, tienes una fuga de gas. Utiliza el pequeño espejo para comprobar debajo de la línea de burbujas.

Apaga el gas si tienes una fuga y repite el paso 5 a 8. Si aún hay pérdida de gas, ciérralo y llama a tu compañía de gas. Si no hay burbujas, la estufa se ha instalado correctamente. Simplemente enciende la luz piloto tal como se indica en el manual de uso.