¿Qué es la ganancia bruta diferida?

Los ingresos netos de un negocio producto de sus operaciones en un determinado período es igual a sus ingresos menos sus gastos en ese mismo período. EL resultado bruto es igual a las ganancias del negocio menos los costos de ventas, donde los costos de ventas son la suma de todos los gastos en que se incurrió para adquirir los productos destinados a la venta y que efectivamente fueron vendidos. La ganancia bruta diferida es una cuenta especial utilizada en el método de ventas a plazos para representar los ingresos todavía no reconocidos.

Los ingresos son los montos que una compañía recibe a cambio de proveer a sus clientes sus productos o servicios, mientras que los egresos son los montos que un negocio gasta para producir aquellos bienes que dan origen a sus ingresos. Según los principios contables más básicos, estas transacciones son registradas por su momento de ocurrencia, aunque existen algunas excepciones. El método de venta a plazos es una de esas excepciones.

La ganancia bruta es el resultado de hacer la simple cuenta ingresos menos costo de ventas. Los ingresos incluyen las ventas netas producto de las principales actividades del negocio y otros ingresos, como intereses recibidos por invertir en bonos, etcétera. El costo de ventas está formado por una serie de gastos en los que se incurrió para adquirir las mercaderías vendidas y es comúnmente llamado costo de las mercaderías vendidas o costo de bienes manufacturados, dependiendo de la naturaleza de la compañía. Incluye gastos como costos de de compras, materiales y mano de obra directa.

El método de ventas a plazo es utilizado cuando el comprador realza el pago del monto que debe en diferentes cuotas a lo largo de múltiples períodos de tiempo. Esto permite que la ganancia bruta de esas ventas sea distribuida a lo largo de los múltiples períodos de tiempo de los pagos que se realizan y es una excepción a las reglas habituales de reconocimiento de ingresos. Sólo puede aplicarse este tipo de reconocimiento contable porque la recaudación en diferentes cuotas de una venta tiende a ser menos segura que en otro tipo de ventas, como por ejemplo las ventas al contado.

Por ejemplo, una compañía realiza ventas a plazo por US$200.000, incurre en costos por dichas ventas de US$120.000, produciendo una ganancia bruta de US$80.000. Ha cobrado US$50.000 en efectivo del monto que le debían el primer año. El método de ventas a plazo permite registrar un porcentaje del dinero en efectivo cobrado como ingreso durante el primer año que es igual a la ganancia bruta divido el monto vendido. En este caso, este porcentaje es 40 por ciento. La compañía registra US$20.000 de los US$50.000 como ingreso y resta la ganancia bruta diferida. Si en el segundo año la compañía recauda otros US$50.000 por las ventas del año anterior, entonces registrará otros US$20.000 como ingreso y deducirá el monto correspondiente de su ganancia bruta diferida.