¿Cómo funciona el subarrendamiento?

Recibiste tu título universitario y encuentras un trabajo increíble; ves con deseo aquellos lujosos departamentos y te preguntas, ¿por qué no dejar tu cuarto de residencia de estudiante o el pequeño departamento que compartes con otros? Puedes ser inquilino en el lugar de tus sueños si optas por el subarrendamiento.

¡Solo sé cuidadoso de no transformar una vivienda unifamiliar en multifamiliar!

El sitio investopedia.com define el subarrendamiento de manera muy precisa y un tanto jocosa, aludiendo que es el “el alquiler de bienes por parte del inquilino”.

Una definición más completa la tiene Forrent.com, que asegura que el subarrendamiento se da cuando una persona que figura como arrendatario, en un contrato de alquiler, acuerda con un tercero el uso o disfrute de la instalación arrendada de forma parcial o total, a cambio de un pago mensual. Es decir, otorga en alquiler una instalación ya arrendada.

En términos un tanto más técnicos, se presenta cuando un arrendatario transfiere parte de su tenencia legal a un tercero, en calidad de nuevo inquilino o coinquilino.

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Estos son algunos ejemplos:

• Si decidiste alquilar (rentar) un penthouse lujoso en una zona privilegiada, y como inquilino te das cuenta que el pago te ha quedado un poco cuesta arriba, podrías compartir el departamento con terceros; esta manera de conservarlo es subarrendar.  
• Individuos y empresas pueden subarrendar una vivienda o propiedad comercial de la que son arrendatarios cuando saben que no harán uso de las instalaciones por un tiempo y no quieran perder el contrato de alquiler de la casa, oficina o apartamento durante su ausencia.
• Cuando las familias, por causas de fuerza mayor, deben mudarse a una nueva vivienda pero todavía les queda tiempo en su contrato actual de arrendamiento; para no pagar una penalización por recisión prematura pueden optar por recibir dinero extra, antes que dejar la instalación vacía.  
• Cuando algunas personas, en calidad de arrendatarios de una propiedad grande, optan por alquilar habitaciones independientes, incluso mientras ellos mismos están habitando esa propiedad. Con estos pueden ayudar a pagar el alquiler de la vivienda o generar un ingreso extra gracias al subarrendamiento.

Sin embargo, antes de subarrendar una vivienda, local comercial, oficina o cualquier parte de una propiedad a otra persona, asegúrate de consultar con tu arrendador antes; así te aseguras de que el subarrendamiento está permitido.

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Una vez que compruebes que en tu contrato de arrendamiento hay una cláusula de subarrendamiento, y recibas el permiso del propietario para subarrendar la propiedad, hay varias cosas a tener en cuenta antes de firmar un acuerdo con la otra parte, que recomienda la Universidad de Pittsburgh:

• Si el contrato de arrendamiento no estipula cláusula alguna sobre la prohibición de subarrendar, se asume que éste es posible
• No obstante, es importante solicitar del propietario su consentimiento para el subalquiler
• El subarrendamiento es regido por leyes estatales de algunos países; verifica si esto aplica en tu país; forrent.com nos comenta que las leyes en Nueva York y San Francisco “poseen pautas donde los acuerdos de arrendamiento no pueden impedir el subalquiler”

Ten en cuenta que la persona que subarrende será responsable de pagarte el alquiler, que luego tú pasarás al propietario. Por ello, asegúrate de seleccionar rigurosamente a la persona; recuerda que tu nombre está en el contrato de arrendamiento actual, por lo que serás la persona responsable de pagar el alquiler no pagado, o peor aún, por daños a la propiedad.

Como dueño se puede exigir que seleccione con cuidado a la persona y que se pidan referencias, especialmente de los propietarios anteriores de quien desea subarrendar.

• También puedes pedir al individuo que firme un acuerdo escrito de subarrendamiento que defina claramente todos los términos, incluyendo el importe de la renta a pagar cada mes, y las fechas en que el subarriendo inicia y finaliza. En algunos estados, un acuerdo verbal es vinculante, pero aún puede ser impugnado ante los tribunales si surgen problemas.
• Considera la posibilidad de cobrar un depósito por adelantado. De esa manera, tendrás alguna protección si la persona que subarrienda la propiedad no paga la renta, o incurre en costos para reparar los daños. Si no hay problemas cuando la persona se mude, puedes devolverle el depósito de seguridad cuando el acuerdo de subarriendo termine.
• Deja por escrito las condiciones de la propiedad al momento que la persona que subarriende tome la posesión. Recaba un respaldo fotográfico amplio o usa una cámara de video para documentar la condición de la propiedad.
• Exige que la persona sepa de los registros antes de darle las llaves. Esta es una de las mejores maneras de protegerte. También podrías figurar como responsable por cualquier factura pendiente de pago cuando regreses, a menos que tengas la precaución y te tomes la molestia de solicitar que los servicios públicos se cambien a nombre de la persona que subarrienda hasta que vuelvas.

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