Negocios
Estrategias de colaboración empresarial
Las estrategias de colaboración empresarial permiten a las empresas unir fuerzas para lograr un objetivo común. Si bien la colaboración de negocios es más común entre las empresas complementarias que no están en competencia directa, es posible negociar una colaboración comercial, incluso con los competidores para evitar conflictos perjudiciales tales como las guerras de precios.
Colaboración empresarial complementaria
La colaboración en los negocios puede ser ventajosa en dos escenarios diferentes. El primer escenario de negocios es donde se plantea que uno de los propietarios de empresas o equipos de gestión no solo genere una idea para un proyecto beneficioso para la empresa, sino que se extiende más allá del alcance de las capacidades de producción de la compañía. En lugar de contratar a nuevos expertos a un costo significativo, la compañía inicia un encuentro con una empresa como socio adecuado para comenzar un proyecto conjunto que beneficie a ambas partes. Un ejemplo es un proyecto de colaboración entre una empresa editorial que se centra en la ficción y un estudio de ilustración, donde los dos unen sus fuerzas para crear un libro ilustrado con un nivel de calidad más allá de lo que cualquiera podría producir individualmente.
Colaboraciones empresarial entre competidores
Con la colaboración empresarial competitiva, la frase "el enemigo de mi enemigo es mi amigo" es cierta. Si bien la colaboración en algunos aspectos del negocio, tales como la fijación del precio de determinados bienes, es inmoral y en algunos casos ilegal, algunas de las ventajas de la empresa que se unen no tienen consecuencias negativas en lo moral o legal. Un tipo de alianza puede ser un acuerdo de no competencia, donde cada parte se compromete a no abrir una nueva ubicación en el área de operación establecida. Esta práctica impide a las empresas participar en las guerras de precios, lo que dejaría a ambas compañías gravemente debilitadas financieramente.
Ventajas de la colaboración
Algunas ventajas de la colaboración incluyen la capacidad para asumir proyectos de mayor envergadura que una sola empresa no podría manejar, así como limitar el potencial de mercado de sobresaturación a través acuerdos localizados de no competencia. Un alto nivel de colaboración entre empresas puede llevar a una simplificación de los procesos de negocio. Por ejemplo, en el mecanizado tradicional sería prácticamente imposible que una sola empresa produzca cada parte necesaria en la fabricación de un automóvil y además podría dar lugar a que dicha empresa sea acusada de intentar un monopolio. Una empresa grande podría convencer a un competidor más pequeño de trasladar la producción para ayudar a la empresa de mayor tamaño mediante la producción de partes y piezas especiales, lo que garantiza la supervivencia mutua de ambas compañías.
Niveles de colaboración y rentabilidad
Algunas empresas pueden tener una larga data de colaboraciones independientes que reporten grandes beneficios sin dar lugar a fusiones y/o cooperativas. Sin embargo, dependiendo de la naturaleza de la empresa involucrada, a veces un escenario cooperativo o fusión es ideal. Dos empresas con diferentes objetivos y capacidades tal vez no deban fusionarse, pero dos competidores similares que habitualmente trabajan en conjunto pueden unir fuerzas, simplemente por el hecho de que ambos conocen sus procesos de negocio por dentro y por fuera, y no requieren de ninguna formación previa para esta integración, por lo cual puede resultar muy combeniente para ambas una unión o fusión. Independientemente del nivel de integración y colaboración, las pequeñas empresas que trabajan en conjunto como parte de una comunidad más grande en lugar de intentar un éxito independiente tienen más probabilidades de tener éxito en el largo plazo, especialmente cuando se enfrentan a titánicos competidores multinacionales.