Estrategias para anunciar perfumes

Resulta extraño de diferentes formas que vender perfume requiera una gran cantidad de anuncios impresos y de TV, pues no puedes oler en cualquier caso. Pero el perfume no es solo una esencia, es algo que los medios ha asociado con un estilo de vida, el amor, el sexo y la personalidad. Esto es completamente estratégico y cada campaña exitosa de un perfume engendra una fragancia exitosa.

¿Por qué Britney Spears tiene una fragancia? Porque su nombre por sí solo venderá. Chanel Nº 5 sigue siendo uno de los perfumes más vendidos en la historia y todo se basa en la idea que Chanel creó de una mujer independiente y sexy. Claro que huele bien, pero nunca se habría vendido si se llamara Fórmula Nº 5, que es de donde viene el nombre. Así que para empezar a vender un perfume, la estrategia consiste en encontrar un nombre que obligue a una mujer a comprarlo. Ya sea que aspiren a ser esa persona o que quieran llevar sus prendas de vestir y accesorios.

La estrategia aquí es decidir quién es tu mercado y donde pueden comprar más fácilmente la fragancia. Puedes comprar White Diamonds de Elizabeth Taylor en una farmacia o Wal-Mart porque se ha determinado que las personas que lo compran y lo usan hacen sus compras allí. Este no es el caso para una fragancia de Marc Jacobs. Y el precio refleja dónde se puede comprar. Una colonia con olor maravilloso sin ningún apoyo de celebridades y sin nombre del diseñador se puede encontrar por menos de US$50. Pero si quieres que tu esencia se venda por US$100 o más, necesitas estar en tiendas por departamentos selectas.

Pero nada vende como un gran comercial de TV. Esta imagen de 30 segundos a veces puede rivalizar en el presupuesto y elenco a una película de bajo presupuesto. Actualmente Charlize Theron camina a través de una habitación de hotel quitándose la ropa una sola pieza a la vez para el comercial de J'adore de Dior. Esto cuesta mucho dinero para que ocurra y aún más dinero para que funcione durante un episodio de Grey's Anatomy. Pero una y otra vez, a menos que el producto apeste (literalmente) las ganancias de este tipo de estilo de vida y la publicidad aspiracional pueden ser más altos que el costo.