Definición de una empresa de servicios

Como consumidores, nos encontramos con empresas de servicios todos los días. Ya sea que estemos utilizando la red satelital de las compañías telefónicas, o disfrutando de la energía eléctrica que nos facilita tanto la vida, sin darnos cuenta somos clientes de este tipo de empresas.

Pero, ¿Qué es una compañía de servicios? No sé si lo habrás notado, pero en los dos ejemplos que acabo de mencionar hay una característica común, y que es lo que define a las compañías de servicios. Energía eléctrica, red satelital de telefonía… Ambos son bienes intangibles, que no pueden ser tocados directamente.

Por definición, una empresa de servicios es aquella que genera sus ingresos al proveer servicios específicos en vez de productos materiales.

Otro ejemplo que puedo darte de este tipo de compañías son las empresas dedicadas a la contabilidad, ya que éstas obtienen sus ingresos al ofrecer servicios como preparar declaraciones de impuestos, realizar auditorías y servicios de activos, e incluso realizar trabajos de contabilidad.

En este sentido, las firmas de contabilidad no venden productos físicos como los comerciantes. En cambio, venden sus servicios a los clientes y tradicionalmente cobran por hora, y esto es cierto con casi todas las empresas profesionales.

Por lo general, los abogados han establecido tarifas por hora y cobran a los clientes según el tiempo que se tarda en prestar los servicios. En esencia, estas empresas realmente venden su tiempo.

A diferencia de las compañías que se enfocan en los productos, las empresas de servicios comúnmente proporcionan bienes y servicios intangibles. Por ejemplo, las empresas de servicios públicos proporcionan a los consumidores electricidad, gas natural y tratamiento de desechos.

La mayoría de los consumidores de estos servicios no ven la electricidad fluyendo a través de los cables, así como tampoco ven los desechos de sus hogares ser sometidos a etapas de purificación en una planta local de tratamiento de residuos.

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No obstante, este tipo de servicios intangibles son vitales para el buen funcionamiento de las comunidades, por lo que las personas están dispuestas a pagar por ellos.

Debido a que las empresas de servicios buscan aprovechar las necesidades de los consumidores, existen empresas de este tipo para casi todo.

Los restaurantes, instituciones bancarias, compañías telefónicas e incluso las compañías de servicios públicos, califican como empresas de servicios.

Nuevas empresas de servicios surgen constantemente debido a los cambios que afectan a los sectores públicos y privados en la economía global, y al nacimiento de nuevos mercados, nuevas tendencias y nuevas necesidades.

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Las empresas de servicios proporcionan a los clientes opciones que están diseñados para satisfacer necesidades recurrentes. Por tanto, éstas empresas están organizadas para orientarse a las personas.

Para ser competitivas, las empresas de servicios deben encontrar la forma de incluir a la gente en la ecuación, y no sólo automatizar y renovar para incrementar la eficiencia operativa. Al proporcionar comodidad a los consumidores, las empresas de servicios favorecen la calidad de la experiencia del consumidor, así como la cantidad de sus ventas.

Las empresas de servicios a menudo tratan de desarrollar relaciones simbióticas con sus clientes, permitiendo a los mismos la subcontratación para terminar trabajo extra o para optimizar operaciones. Como resultado, los clientes pueden personalizar los servicios, en base a un rango de precios.

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Las compañías telefónicas, por ejemplo, son conocidas por ofrecer a los consumidores la posibilidad de personalizar sus planes de llamadas. Los consumidores pagan más por una amplia gama de características, tales como llamada en espera, conexión a Internet o llamadas ilimitadas.

Por ende, aunque este tipo de empresas pueden vender servicios que son intangibles, siempre buscan atraer a los clientes ofreciendo opciones prácticas y personalizadas de sus servicios.