Cómo escribir una descripción del trabajo de limpieza

Las descripciones de trabajo describen las responsabilidades, tareas individuales, objetivos e interacciones necesarias para tipos específicos de trabajo. Normalmente siguen un patrón similar sea cual sea el trabajo. De esta forma permite al empleador mantener al empleado responsable y evaluar las calificaciones de los aplicantes. La descripción debe enumerar las responsabiliades fundamentales o principales del puesto, con información precisa y clara. Para escribir una descripción del trabajo de limpieza, sigue estos principios:

Escribe un breve resumen de la posición, no más de dos o tres frases, subrayando las responsabilidades, a quién reporta el empleado y qué es requerido y cómo se realiza el trabajo. Piensa en las necesidades particulares del puesto que quieres crear y basa tu resumen en ello.

Escribe la propia descripción de trabajo en dos partes. La primera parte incluirá una lista de las responsabilidades más importantes y tareas del trabajo y la parte dos incluirá otras tareas secundarias o tareas que todos los empleados comparten. Para un puesto de limpiador, por ejemplo, el empleado limpiará los suelos barriendo, fregando aspirando; vaciar las papeleras, aspirar los muebles; limpiar las superficies de cristal; quitar el polvo; preparar la mezcla de limpieza, limpiar en profundidad las alfombras; pulir o encerar los suelos; seguir las instrucciones de limpieza de forma que los accesorios y muebles no se estropean; reordenar o mover muebles para limpiar y realizar los pedidos. Las tareas periféricas pueden ser mantener en general un ojo en la seguridad o guiar a personas que tienen preguntas. El trabajo en si mismo no está definido por esas tareas secundarias.

Usa verbos específicos para describir las responsabilidades: limpiar, aspirar, ordenar.

Revisa el lenguaje para asegurarte de que es tan detallado y específico como sea posible. La gente que contrata debe juzgar a los aplicantes en función de las tareas que deban realizar en tu lista de requerimientos; por ello ser específico es esencial.