La diferencia entre utilidad y margen de utilidad

Es muy común que los términos de utilidad (también conocidos como ganancia o beneficio) y el margen de utilidad, se utilicen como sinónimos pero no es así. La utilidad o resultado se mide en términos de cifras monetarias, mientras que el margen de utilidad se expresa en porcentaje respecto a las ventas; ambas medidas se complementas a efectos de un análisis certero.

Esto significa que son dos medidas o métricas correlacionadas que usan los mismos insumos a efecto de cálculo y permiten un mismo análisis o conjetura, pero se expresan de manera distinta.

Tanto para la utilidad como para el margen podemos tener distintos niveles de apreciación como lo son la utilidad y el margen bruto; la utilidad y el margen operacional o de explotación; y finalmente, la utilidad y el margen neto.

Una empresa puede generar un margen de utilidad que podemos considerar elevado; sin embargo, cuando valoramos en detalle las cifras, podemos apreciar que lo que observamos como un margen elevado realmente es una utilidad irrisoria en términos monetarios.

El caso contrario también aplica, es decir, podemos concluir que un margen es extremadamente bajo; sin embargo, si la empresa está orientada a las ventas como es el caso de los supermercados, ese ínfimo porcentaje puede representar millones de dólares en ganancia.

Con lo expuesto, nos queda claro que ambas métricas deben ser valoradas para medir el desempeño de la empresa a nivel de resultados.

A continuación afianzamos los conceptos y las diferencias entre utilidad y margen de utilidad.

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La utilidad también es conocida como beneficio, ganancia, resultado y en algunos casos, cuando se trata de la línea de fondo o resultado final, se le llama ingreso neto.

Es simplemente la cantidad de dólares (o en unidades monetarias) calculada cuando todos los gastos para un periodo particular son sustraídos de los ingresos logrados en ese lapso de tiempo.

Si este número es positivo, la compañía genera utilidades; en caso contrario, la empresa está operando con pérdidas. Una utilidad es adecuada cuando satisface las expectativas de los accionistas, después de haber honrado los compromisos por deuda y las cargas fiscales.

Cuando se trata de la utilidad neta, ese dinero se coloca en las ganancias acumuladas de la compañía o se entregan a los propietarios de la empresa como un retorno de su inversión por la vía del reparto de dividendos.

El margen de utilidad es un ratio que actúa como un medidor en términos porcentuales de la gestión operativa y financiera de la empresa, dependiendo del nivel al que se estime (bruto, operacional o neto).

Se mide como un porcentaje: cuánto de cada dólar de ventas (o la moneda de tu país) es transformado en utilidad por la gestión de la empresa; mientras más elevado, se concluye que la gestión mejora.

Un analista financiero puede concluir que el margen neto es adecuado cuando éste iguala o supera el costo promedio ponderado de las fuentes de capital invertido en la empresa.

Conocida la cuantía o importe de las utilidades, el cálculo del margen resulta muy simple y obedece al cociente entre la utilidad sobre las ventas.

De modo que para conocer la tasa o margen de utilidad, los propietarios tienen que dividir el número de la utilidad por el número que totalizaron las ventas. Por ejemplo, si una empresa logró 100,000 dólares en ingresos y una utilidad neta de 40,000 dólares, entonces el margen o tasa de utilidad neta para ese periodo sería de 40% (40,000/100,000 = 0.40 o 40%).

El sitio Small Business comenta que una buena parte de las empresas, en su afán por mejorar los márgenes de ganancia, apela en primera instancia por aumentar las ventas cuando posiblemente unas cuantas medidas de reducción de costos pueden ser más eficientes, más aún en un mercado fuertemente competido.

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Si bien estas dos métricas contienen la palabra “utilidad”, son complementarias pero no son intercambiables.

La utilidad entrega un número frío con respecto a cuánto dinero fue producido por una compañía; sin embargo, no cuenta la historia completa. Sin mirar el número del margen de utilidad, no hay manera de contar cómo la compañía lo hizo, al controlar los gastos y cuánto de la cantidad de las ventas fluye a través de la línea de fondo.

Como indicamos al inicio, sólo porque una empresa tenga una enorme utilidad, no necesariamente significa que es exitosa porque puede tener extremadamente bajos márgenes de utilidad.

Si incrementas tus ganancias mientras mantienes tus costos constantes o disminuyes los costos mientras mantienes las ganancias constantes, ambasaumentarán: la utilidad y el margen de utilidad.

Sin embargo, es posible incrementar uno de estas dos cifras sin aumentar la otra. Por ejemplo, puedes aumentar tus ganancias pero incrementar tus costos también. Cuando ello ocurre, tu beneficio puede ser más grande en términos monetarios, pero dependiendo de los costos asociados, puede que no haya cambios en el valor del margen de utilidad.

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Revisa la utilidad cuando estés tratando de aproximar una capacidad de pago de la empresa ante nuevas inversiones o proyectos, ya sea por la vía de la autofinanciación, una nueva emisión de capital o préstamos.

Si las utilidades de la empresa aumentan del año uno al año dos y al año tres, en una mayor proporción que la tasa de inflación, por ejemplo, sabrás que estás experimentando un grado de éxito con el tiempo.

Si un analista desea comparar negocios que son similares, el margen de utilidad a menudo es una mejor métrica porque le mostrará cómo las compañías controlan sus costos, independientemente del tamaño de sus operaciones.