La diferencia entre el análisis FODA y el análisis PEST

Las empresas aplican los métodos de análisis FODA y PEST para comprender la viabilidad de un nuevo producto, de un proyecto o de una posible expansión. Son comúnmente utilizados en conjunto para tener una mejor comprensión del entorno competitivo y económico, pero representan dos enfoques contrastantes. El análisis FODA (SWOT en inglés) es más flexible y se puede aplicar en diversas formas a las funciones del negocio. El PEST es más rebelde, utilizado sólo para comprender plenamente las consecuencias de entrar a un nuevo mercado.

FODA es el acrónimo de: fortalezas, debilidades, oportunidades y amenazas (en inglés SWOT es el acrónimo de: strengths, weaknesses, opportunities and threats). Se aplica comúnmente a un producto, proyecto o negocio para evaluar su posición en el mercado competitivo. Teniendo en cuenta todos los detalles del proyecto, los comercializadores tratan de tener una idea de cómo les iría en el mercado frente a los competidores. Las fortalezas y debilidades son internas. Un ejemplo de las fortalezas de un producto podría ser el valor de la marca o la base de clientes leales. No tener suficientes canales de distribución sería una debilidad. Las oportunidades y amenazas son factores externos: un mercado sin explotar para un producto representa una oportunidad; la fabricación de un producto similar por parte de un competidor puede representar una amenaza.

Para entender el clima de un nuevo mercado, los comercializadores deben implementan el análisis PEST, que evalúa el clima político, económico, social y tecnológico. El análisis PEST informaría a los comercializadores sobre la burocracia política, las desaceleraciones económicas, los obstáculos sociológicos o culturales, y si el nuevo mercado carece de la capacidad tecnológica para realizar negocios. También puede sugerir qué áreas serían las mejores para infiltrarse, tomando en cuenta las estructuras políticas y económicas. Por ejemplo, una compañía que busca expandirse en un estado en particular puede descubrir a través del análisis PEST que el estado ofrece incentivos para atraer a empresas de fuera del estado y que eso hace que cuente con los recursos económicos para hacer la expansión más rentable.

Los comercializadores que tratan de evaluar la viabilidad de un producto son más propensos a utilizar el análisis FODA. Esto se debe a que este análisis ofrece una microanálisis, una evaluación a profundidad e introspectiva, que es esencial al considerar el lanzamiento de un nuevo producto. Cuando está desarrollando la posición deseada de un producto, un comercializador debe primero evaluar las fortalezas y debilidades. El análisis PEST proporciona un macroanálisis, que se centra en la imagen socioeconómica completa, no es útil en esta situación. Por ejemplo, un fabricante de camisas locales, buscando en el mercado un nuevo estilo de camiseta, muy probablemente se beneficie del uso del análisis FODA para evaluar su posición frente a los competidores locales. No es necesario evaluar el panorama sociopolítico de un mercado del que ha sido parte durante años.

Los comercializadores normalmente emplean el análisis PEST al infiltrarse en un nuevo mercado, ya sea para lanzar un nuevo producto o un nuevo negocio. El análisis FODA solo no puede dar la profundidad de la visión necesaria para tomar una decisión informada sobre la expansión, ya que no cubre lo suficiente de los elementos externos involucrados. Por ejemplo, si el mismo fabricante de camisas locales descubrió una oportunidad de exportar sus camisas a Italia, sería necesario identificar los incentivos comerciales u obstáculos asociados con la expansión. También podría considerar el cambio de divisas, los problemas de compatibilidad de tecnología y la actitud de los consumidores hacia los productos extranjeros. El análisis FODA se referiría solamente a la cuestión de la oportunidad o amenaza en el contexto de la competencia.

El análisis FODA se puede aplicar a la mayoría de las fases del negocio, ya que es una manera de analizar el funcionamiento interno de las actividades empresariales. Esto hace que sea aplicable al evaluar los nuevos recursos de la empresa, las asociaciones y/o adquisiciones. Es más flexible en su capacidad de aplicación que el PEST, que se utiliza para evaluar los factores externos. Una casa de diseño puede utilizar el análisis FODA para algo tan simple como comprender la viabilidad de contratar a un sastre muy venerado. Se podría analizar si la medida sería un activo o un pasivo para la empresa, de manera que se aprovechen las oportunidades potenciales de contratarlo frente a cualquier amenaza.