13 desventajas de vivir en el campo

El campo no es solo un lugar hermoso para vivir, sino que en él vas a encontrar paz y tranquilidad, además que podrás colocarte en contacto con la naturaleza. Dependiendo de dónde te encuentres, el costo de vida puede ser menor que en los pueblos o las grandes ciudades. Por otra parte, también puede ser que gastes más dinero en transporte u otros materiales, tales como combustible, si es que trabajas en la ciudad. Puedes tener el antojo de estar al aire libre y tener grandes espacios verdes, pero piensa en todos los elementos que puedas necesitar para llevar una vida rural cómoda, antes de convencerte a ti mismo de la idea de mudarte al campo. Es por esta razón que en el siguiente artículo te indicaremos algunas de las desventajas de vivir en el campo.

El clima puede ser un gran inconveniente a la hora de trasladarse al campo. En algunas partes del país, los inviernos y grandes tormentas traen ventiscas. Así como la primavera trae lluvias torrenciales e inundaciones.

Aunque algunas carreteras están pavimentadas, muchas todavía son de tierra o grava, y están ubicadas cercanas a las montañas, por lo cual se pueden producir deslaves de barro y piedra, lo que es un riesgo y puede ocasionar un accidente.

Durante las tormentas de nieve, es posible que te tardes varios días para llegar a tu casa. Debes planificar esto, de vez en cuando, si llega a nevar durante un largo periodo de tiempo, puesto que para evitar cualquier accidente el gobierno puede implementar cerrar la carretera como medida de precaución.

Durante una inundación, también podrías estar confinado en tu casa durante unos días, en caso de que las carreteras hacia la ciudad estén bajo el agua.

Vivir en el campo implica una mayor dificultad cuando se trata de la planificación de actividades y llegar a lugares a tiempo.

A menudo, hay que salir más temprano para llegar a diferentes eventos, incluyendo la escuela o el trabajo. Todo esto va a depender de la distancia en la que esté ubicada tu casa de campo y la ciudad. Por lo tanto, deberás prevenir salir una o dos horas antes, para llegar puntual.

Además, la oportunidad de conseguir trabajo también se reduce considerablemente y se limita en su mayoría actividades del campo, por lo que debes estar acostumbrado.

Cuando se vive en el campo, puedes ser menos propenso a asistir a actividades sociales debido a las molestias generadas por la distancia de tu residencia con la urbe. Por lo tanto, debes ser más creativo al momento de elegir qué hacer cuando vives en el campo.

Podría ser buena idea, si deseas acudir a algún evento social en la ciudad, que le pidas el favor a algún familiar o amigo para pasar en su casa la noche. De esta manera, podrás asistir a tu cita y no tendrás en mente que debes recorrer una gran distancia de regreso para poder llegar a tu domicilio.

Por otro lado, los tipos más creativos o ambiciosos podrían argumentar que no hay nada que hacer en el campo, lo cual puede ser cierto en función de tus intereses.

En el campo, hay que confiar en actividades más orientadas al exterior para el entretenimiento. Una idea para distraerte, es practicar deportes al aire libre, tales como yoga, ultimate frisbee, entre otros.

Los que viven en el campo pueden tener más problemas cuando se trata de plagas, pues debido al clima de humedad que hay en el campo, habrá más mosquitos. También, por estar aislado de la ciudad, es más probable encontrar vida salvaje, tales como osos o pumas, que podrían lastimar a tu familia o mascotas.

Es probable entrar en contacto con más insectos o serpientes, dependiendo de tu ubicación. Por lo que tu botiquín de primeros auxilios deberá estar preparado con medicamentos que te ayuden a combatir esas picaduras.

Recordemos que al estar alejado de la ciudad, es menos probable conseguir hospitales o medicamentos específicos.

Puede ser fácil aislarse para las personas que viven en el campo, por lo general suelen volverse un poco ermitaños. Por lo tanto, a las personas a menudo les resulta incómodo conducir a la ciudad.

Del mismo modo, a tus amigos les puede resultar molesto transportarse hasta tu residencia para hacerte una visita. Este tipo de comportamiento podría afectar tu vida social. Los jóvenes podrían tener más problemas, ya que no se encuentran en el campo las opciones de espacios recreativos que ellos podrían querer.

Otra de las desventajas es la poca oferta cultural. Muchas ciudades y pueblos tienen lecturas literarias, además de cines y conciertos que se producen con frecuencia. Al vivir en el campo, no tendrás acceso a conciertos, exposiciones de arte, obras teatrales, etc., ya que gran parte de estos eventos se dan en las zonas urbanas. Es posible que tengas acceso a libros u a otros eventos en línea, si tienes sede serconexión a internet.

La relación con los vecinos puede ser complicada en el campo, sobre todo si estás acostumbrado a vivir en la gran ciudad, donde el hecho de vivir entre muchísima gente proporciona cierto nivel de privacidad y anonimato. La gente que vive en el campo o en pueblos pequeños tiene una relación muy cercana con sus vecinos, lo que puede ser una ventaja o una desventaja de acuerdo a tu manera de ser.

Si estás acostumbrado a trabajar en oficina, puede ser que sea muy difícil para ti acostumbrarte al trabajo físico que requiere el estar en el campo, como arar la tierra, cuidar animales, o hacer proyectos de construcción o renovación. Además, las oportunidades de empleo en el campo son mucho más escasas, y aquellas que encuentres podrían requerir habilidades que una persona de ciudad no posee.

Vivir en el campo también podría ser más inseguro, debido al poco personal de servicios policiacos, por ejemplo. Si alguien te ataca o te roba, la baja densidad de la población hará difícil que puedan escucharte al momento de pedir ayuda.

La poca población y el aislamiento hace difícil el aventurarse en los alrededores, pues podrías perderte y no encontrar el camino de regreso a casa.

Las novedades tecnológicas como computadoras, ‌smartphones‌, electrodomésticos y más, tardan mucho más en llegar al campo que a las grandes metrópolis, si es que llegan. Además, la conexión al Wifi podría ser deficiente, por lo que si trabajas desde casa, quizá debas reconsiderar el mudarte a una zona rural.

Los servicios públicos y de salud también son más escasos. Entre más aislada esté una comunidad, más difícil es el acceso a hospitales, clínicas, y laboratorios. Es probable que tengas que trasladarte a pueblos cercanos o a la ciudad para poder consultar a un médico, o realizarte un estudio especializado. Los supermercados y tiendas de todo tipo las encuentras fácilmente en las ciudades. En el campo tienes que adaptarte a las opciones que hay y no se tiene variedad.

Si tienes hijos en edad escolar, mudarte a una zona rural quizá no sea la mejor idea. Es probable que el pueblo a donde te mudes carezca de escuelas o guarderías, y si las hay, quizá sean demasiado pequeñas o no ofrezcan el grado de educación que tus hijos necesitan. Esto podría dificultar sus posibilidades de recibir una enseñanza de calidad y una socialización adecuada, lo que podría interferir con su desarrollo. Además, las universidades y centros de educación superior, en su mayoría, se encuentran localizados en las grandes urbes.

Las carreteras y caminos serán muy diferentes a las que estás acostumbrado en la gran ciudad. Es posible que, si hay una tormenta u otra precipitación atmosférica que dañe las vialidades, los arreglos tarden muchísimo más en llegar que en una metrópoli. Además, el transporte público puede ser escaso o inexistente. Si necesitas ir a la ciudad o salir del pueblo por vía terrestre, quizá necesites un vehículo especial para desplazarte. Sin embargo, en un medio rural no te enfrentarás a los clásicos atascos en el tráfico que se experimentan en las grandes urbes.

Apartamento, estudio, dúplex, casa… en la ciudad, existe una multiplicidad de tipos de vivienda sobre los que puedes elegir. En el campo, la variedad de viviendas es mucho más reducida.

Vivir en un entorno rural ofrece muchísimas ventajas sobre el vivir en las grandes urbes, como la calidad de vida, la tranquilidad, la posibilidad de respirar aire puro, la buena comida o la falta de estrés. Sin embargo, antes de decidir mudarte, debes analizar y tomar en cuenta los inconvenientes de vivir en el campo.

Entre más distanciado esté el pueblo de una metrópoli, más diferencias encontrarás en el estilo de vida. Esto no tiene por qué ser un problema, simplemente tienes que adecuar tu ritmo de vida y ser flexible respecto a las posibilidades ofrecidas por un pueblo pequeño.