Cómo describir un proceso en una voz pasiva

Todas las oraciones se componen de, al menos, un sujeto y un verbo. El tiempo de los verbos se refiere al tiempo en que la acción se lleva a cabo, la acción puede ser en tiempo pasado, presente o futuro. Los verbos también varían en la voz. Son voz pasiva o activa. En la voz activa, el sujeto de la oración es quién o qué está realizando la acción. En la voz pasiva, el objeto recibe la acción. Es importante mantener estas reglas gramaticales simples en mente cuando se describe un proceso en la voz pasiva.

Comienza tu primera frase con lo que sería el objeto principal de la oración en voz activa. Por ejemplo, si estuvieras tratando de explicar cómo hervir el agua para hacer té, el primer paso sería el siguiente: "Pon agua en la olla". Esta es la voz activa. El sujeto, o hacedor de la acción, es la segunda persona imperativa (tú).

Para cambiar de la voz activa a la pasiva, hazlo en dos pasos. En primer lugar, incluye una forma del verbo "ser" después del sujeto. Usando el ejemplo y usando una forma del verbo "ser", podrías escribir: "estabas poniendo agua en la tetera".

En segundo lugar, cambia cualquier oración de activa a voz pasiva tomando el objeto de la sentencia y haciendo de ella el sujeto. Por ejemplo, el siguiente paso para hacer el té podría ser expresado en la voz activa como: "Vierte el agua caliente en un vaso". Expresada en voz pasiva, la frase es: "El agua se vierte en el vaso". Recuerda que en la voz pasiva, el sujeto de la oración, (quien realiza la acción), no es tan importante como el objeto directo, el cual, en este caso, es “el agua”.

Continúa expresando los pasos del proceso de la misma manera. Transforma los objetos directos de los verbos en los sujetos de la oración, en oraciones en voz pasiva. Por ejemplo, la siguiente oración puede ser: "Una bolsa de té se agrega a la taza de agua caliente".