Definición de tasa de interés vigente

En cualquier mercado, el dinero es prestado en varias formas, a una tasa destinada a compensar al prestamista por la cantidad de dinero y tiempo prestado. Si se observan de lado a lado, préstamos similares entre los diferentes prestadores con frecuencia llevarán tasas de interés similares. El nivel del tipo de interés general para un determinado tipo de préstamo a través de numerosos prestamistas se conoce como la tasa de interés vigente.

Una tasa de interés es un porcentaje numérico que se multiplica, por lo general una vez al año, por la cantidad de dinero prestado y determina la remuneración del prestador (es decir, es el precio del dinero). El interés simple se calcula multiplicando la tasa de interés sólo por la cantidad prestada originalmente, o una cantidad principal. Esto significa que las cantidades de intereses periódicos siempre serán las mismas. El interés compuesto multiplica la tasa de interés por el monto de capital más los intereses devengados hasta ese momento. Como resultado, el interés compuesto se acumula más rápidamente que el interés simple. El interés compuesto normalmente se aplica a las tarjetas de crédito.

Cualquier transacción entre dos partes en la que una de las partes pide dinero a la otra implica una tasa de interés. Desde el punto de vista del consumidor, elementos tales como hipotecas, préstamos académicos y líneas de crédito requieren que el consumidor pague intereses al banco de préstamo para el uso de los fondos prestados. Los valores representativos de deuda, como los bonos, cuentas de ahorros y del mercado monetario a corto plazo (papel comercial), también constituyen los préstamos de un punto de vista institucional, ya que los consumidores que los compran están prestando dinero a las entidades emisoras.

Las tasas de interés prevalecientes se determinan en base a las tasas de los bancos establecidos por la autoridad bancaria central de un país (en los EE.UU., la Reserva Federal). Las tasas bancarias son la tasa efectiva a la que un banco central presta dinero a los bancos comerciales en su propio mercado, o país. Los bancos comerciales pequeños luego prestan dinero a los consumidores y las empresas en una tasa similar, pero ligeramente superior, que permita un margen de beneficio. Un banco central fija las tasas bancarias de acuerdo con sus propios objetivos para fomentar el crecimiento económico estable. Esto implica, pero no se limita a, aplazar la inflación y mantener la estabilidad de su moneda en el mercado de divisas.

En base a las tasas bancarias, las tasas de interés que prevalecen son determinadas con eficacia por la coyuntura económica en un momento dado. Durante un período de crecimiento económico estable, o expansión, las tasas de interés que prevalecen aumentan en respuesta a un aumento proporcional en las tasas bancarias. Este aumento es el resultado de una mayor demanda de créditos ya que las empresas buscan expandirse. En otras palabras, los "precios" de los préstamos aumentan con el aumento de la demanda, al igual que los precios de los bienes y servicios. Por el contrario, un descenso sostenido de crecimiento económico o recesión, impulsa a los bancos centrales para reducir las tasas de los bancos, ya que las empresas buscan ir más despacio en el crecimiento debido a la incertidumbre económica.

Dado que los bancos comerciales desembolsan préstamos a una tasa de interés basada en tasas bancarias locales, todas las variaciones en las tasas de interés cobradas por los bancos comerciales deben ser mayores que la tasa bancaria aplicable. El riesgo de un préstamo concedido se refleja en la diferencia entre la tasa de interés del préstamo y la tasa de interés vigente para préstamos similares. Cuanto más cerca de la tasa de interés está la tasa de interés vigente, más solventes del prestatario. A la inversa, un préstamo con una tasa de interés que es significativamente más alta que la tasa de interés vigente indica mayor riesgo de impago por parte del prestatario.