Negocios
Definición de estándares de calidad internacionales
Con la globalización y la competencia que existe en los mercados internacionales, la apuesta de las empresas por la calidad y la eficiencia es fundamental para la conquista de su cuota de mercado. Además, cualquier organización con estructura operativa que no esté enfocada en la calidad, estará expuesta a incurrir en altos costes que afectan sus beneficios. En este sentido, cumplir con los estándares de calidad internacionales es imprescindible para cualquier empresa.
¿Qué son los estándares de calidad internacionales?
Según indica el diccionario de la real academia española un estándar es aquel “que sirve como tipo, modelo, norma, patrón o referencia”.
Los estándares de calidad son criterios o reglas establecidas por organizaciones que ayudan a determinar la conformidad de un proceso entre las diferentes naciones. Estas reglas o criterios de gestión de calidad facilitan la ejecución de negocios de un determinado sector a nivel global.
Lee también: La importancia de la calidad de los productos en un negocio
Estándares de calidad ISO
ISO es la organización internacional para la estandarización (ISO International Organization for Standardization). Esta organización con sede en Ginebra y fundada en 1947 es la mayor organización de normas internacionales del mundo, actualmente está estructurada como una federación de organismos, entre los que encontramos AENOR de España, AFNOR de Francia y DIN de Alemania entre otros. Desde su fundación ha publicado más de 20.000 normas internacionales de distintos sectores, enfocándose principalmente en la fabricación y comercio.
Las normas ISO abarcan múltiples sistemas entre los que se encuentra:
ISO 9001: esta norma está enfocada en la gestión de calidad, con la finalidad de demostrar que la empresa es capaz de fabricar productos que cumplan las exigencias de los clientes. ISO 9002 es un sistema de normas que certifica el aseguramiento de la calidad en la producción, la instalación y el servicio.
ISO 14001: esta norma de estandarización es la segunda más conocida de las ISO, corresponde al sistema de gestión del medio ambiente, por lo que sus controles están enfocados en la protección de la naturaleza. También se encarga de evaluar las leyes que la empresa debe seguir en materia de ambiente.
ISO 18001: esta norma se puede implantar conjuntamente con la ISO 9001 y persigue detectar los posibles factores de riesgo laborales dentro de la empresa, con la finalidad de que se resguarde la integridad de los trabajadores.
ISO 27001: esta certificación de gestión de calidad está enfocada en la seguridad de la información, por tanto, persigue la estandarización de las buenas prácticas que minimicen o eviten los riesgos asociados a la información, mejorando los procesos de comunicación y resguardando los datos.
Quizás te interesa: Cómo desarrollar un plan de control de calidad
Beneficios de la implantación de Estándares de calidad
La implantación de estándares de calidad como el ISO 9001 trae varios beneficios para la empresa. En cuanto a los clientes, la implementación de estándares de calidad aumenta su nivel satisfacción. Por otra parte, el mercado mejora la imagen de los productos o servicios, lo que permite ganar cuotas de mercado y a su vez acceder a otros nuevos. Internamente para la empresa los estándares de calidad son un mecanismo para mantener e impulsar la eficacia, entrar en un proceso de mejora continuo, optimizar el aprovechamiento de los recursos e impulsar la motivación y participación del personal.
La implementación de normas ISO requiere, por parte de toda la organización, un gran compromiso y flexibilidad. La alta dirección debe mostrar su liderazgo con la intención de que toda la empresa tenga como propósito común la implantación de los estándares de calidad. Todos los factores que puedan afectar la implantación de la norma deben ser tomados en cuenta, no solo los que están relacionados con la parte interna de la empresa, los factores externos como el entorno competitivo de la empresa y el marco legal deben tenerse en consideración.
Las normas ISO son de carácter voluntario, y se adaptan a cualquier tipo de empresa, grande, mediana o pequeña. La implementación de estas normas implica para la empresa un reconocimiento internacional y le permite hablar de sí misma y su calidad con las mejores compañías a nivel mundial. En el caso de empresas que se dedican al comercio internacional, el esfuerzo que puede significar la implementación de la norma se ve compensado por los niveles de calidad que se logran, los cuales le permitirán a la empresa colocar sus productos en el competitivo mundo de las exportaciones.
Deberías leer: Metas y objetivos de un ingeniero de control de calidad
Otros tipos de normas de calidad
Varios países tienen normas propias de estandarizaciones, muchas de ellas están integradas a la ISO como lo indicamos anteriormente. Este es el caso de la DIN (Deutsches Institut für Normung), el cual tiene sede en Berlín y es el organismo alemán encargado de la estandarización. En el caso de España se encuentra la Asociación Española de Normalización y Certificación (AENOR), creada en 1986 y que actualmente se encuentra entre las diez certificadoras más importantes de mundo. En Canadá se encuentra la CSA (Canadian Standard Association), quien redacta las normas para distintos productos desde hace varios años.