Finanzas
Definición del corto plazo en economía
En los procesos de producción de las empresas es común usar el concepto del tiempo como un factor determinante para los planes y tareas que se ejecutan y la planificación de negocios.
A tal fin, suele hablarse del término corto plazo en economía y ciencias financieras, así como de las variantes mediano y largo plazo.
Estos términos se refieren a la duración del período de tiempo en el que, en base a lo planeado, los factores de producción fijos no podrán cambiarse, pero durante el cual si pueden alterarse o modificarse los niveles de utilización de los factores de producción variables.
De esta forma, el corto plazo en economía cambia de medida según el tamaño y tipo de operaciones de la empresa, pues en algunos casos puede tratarse de apenas cuantos días mientras que en otros se hablaría de varios años.
Sin embargo, según lo establecido entre los modelos estipulados en el Plan General de Contabilidad, se “corto plazo” es una referencia a períodos que no superan los 12 a 18 meses.
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Recordemos que el Plan General de Contabilidad es un conjunto de normas y principios que se aplican en cada país y que deben seguir las empresas al llevar adelante su contabilidad.
A nivel internacional se ha convertido en una práctica común el uso del Plan General de Contabilidad, adaptado en cada caso a las Normas Internacionales de Información Financiera.
Gracias a estas normas, se facilita la realización del trabajo contable y se hacen más claras y transparentes las interacciones entre empresas de distintos países en el marco de las leyes internacionales y nacionales.
La definición de corto plazo también varía según el área de la que estemos hablando. Por ejemplo, en materia de créditos y planificación, el término corto plazo se aplica a un lapso de 12 meses exactos, que si nos referimos al área financiera, se considera de corto plazo a las operaciones cuyo tiempo de vencimiento es igual o menor a este mismo período.
Por el amplio uso que tiene este concepto, es necesario repasar los significados y aplicaciones del término corto plazo en el área de la economía y sus diferentes implicaciones.
Relación del corto plazo con los insumos fijos y variables
Debido a que parte de la definición de la duración del plazo (corto, medio o largo) se basa en características de tiempo que rigen a los factores de producción o insumos, hay que explicar que para que estos sean calificados como fijos o variables deben estar bajo control del productor.
Esto significa que tales factores no pueden ser del tipo natural, como el clima, o condiciones del mercado, pues esta es una materia que no está bajo el control del productor.
Entre los insumos fijos en el corto plazo que encontramos más frecuentemente podemos mencionar factores como el capital o la capacidad de producción instalada en la fábrica.
Por su parte los insumos variables son usualmente la mano de obra, ya que se considera que se puede cambiar fácilmente ya sea incrementando las horas o contratando más empleados.
El corto plazo y costos de producción
En el corto plazo no solo hablamos de condiciones que rigen a los insumos en función de si son alterables o no en el corto tiempo. También debemos hablar de los costos, que a su vez pueden dividirse en fijos y variables.
Los costos fijos son los que se mantienen incluso si no hay ninguna producción. Por ejemplo, en el corto plazo un productor no está haciendo un beneficio donde su ingreso sea más que su costo total (fijo más variable).
Si este ingreso es menor que sus costos totales está generando una pérdida. Por lo tanto, el productor puede terminar su producción, e incurrir solo en los costos fijos o continuar con la producción, si al menos todos sus costos variables y parte de sus costos fijos están cubiertos.
Papel del corto plazo en la ley de rendimientos decrecientes
Esta ley establece que a medida que los insumos variables se incrementan en el corto plazo, el retorno marginal de estos comenzarán a declinar.
Por ejemplo, comúnmente el productor incrementa la mano de obra para incrementar la producción. La ley de rendimientos decrecientes dice que los trabajadores adicionales generarán un incremento más grande en la producción que el siguiente grupo de trabajadores que se agreguen.
Esto es porque en el principio cuando los nuevos trabajadores fueron contratados había capital adicional y tecnología que no había sido utilizada, por lo tanto la producción se incrementó en una gran cantidad.
A medida que se agregaron más trabajadores, el capital se sobre utilizó y no generó tanto incremento en la producción como al principio.
Aplicación macroeconómica del corto plazo
En la teoría macroeconómica, en el corto plazo los precios y salarios son considerados fijos o "pegados", mientras que en el largo plazo son flexibles.
En la mayoría de las teorías se asume que los precios y salarios toman más tiempo cambiar en el mercado, con las condiciones cambiantes y el arrastre que se mantiene.
Diferencias entre el corto plazo y el largo plazo
En contraste con todo lo que caracteriza al término económico corto plazo, tenemos el largo plazo. En este, todos los factores de producción son variables y ninguno es fijo.
Por ejemplo, en el largo plazo se asume que el productor puede incrementar su capital con la adquisición de más tierras y la instalación de más fábricas para incrementar la producción.
Entender la diferencia entre corto y largo plazo en el plano de la economía es muy sencillo, pues más que una referencia al tiempo estos términos se relacionan principalmente con la posibilidad inmediata o no de cambiar ciertos parámetros que se relacionan con la producción.
Tal y como decíamos antes, en el corto plazo, los factores de producción, o al menos uno de ellos, son fijos. Por su parte, en el largo plazo hablamos de un período en el que todos los factores de la producción son variables.
La duración de los períodos (corto, mediano o largo) no están definidos, por lo que hablar de largo plazo dependerá de las características propias de la empresa o unidad productiva.
De esta forma, es posible decir que la diferencia principal entre ambos periodos es el proceso productivo el cual difiere, donde es necesario la dotación del capital.
Además del hecho de que los factores de producción sean fijos o variables, hay otro aspecto en el cual el corto y mediano plazo también son diferentes. Se trata de los gastos. Cuando se trabaja a corto plazo, la empresa se hace cargo tanto de gastos fijos como de gastos variables.
Los gastos fijos en sí no se relacionan con la actividad que realiza la empresa o unidad de negocio, sino más bien con la magnitud o capacidad de ésta para realizar dicha actividad.
Un ejemplo de gasto fijo es la capacidad instalada de producción de una fábrica o el capital de una compañía.
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Por su parte, los gastos variables si tienen relación directa con la actividad (y con la magnitud de esta), pues se relacionan con factores que pueden ser modificables si es necesario. Un ejemplo ya citado es el de la mano de obra, cuyos gastos generados pueden variar si se aumenta o disminuye el número de empleados o si se recortan o aumentan las horas de trabajo diario.
Este tipo de variable relacionado con el largo plazo obliga a las empresas a tener un mejor manejo de su producción, de forma que sus gastos variables sean cubiertos y se pueda obtener una ganancia al término de determinado período productivo.
El corto plazo y la movilidad de mercado
En el corto plazo hay una capacidad más limitada para mover productos e ingresar insumos dentro del mercado, a diferencia del largo plazo en que la movilidad es mucho más dinámica.
Desde el punto de vista financiero, cualquier actividad realizada a corto plazo puede brindar una mayor cantidad de beneficios económicos.
Esto contrasta con el largo plazo, donde la dinámica de la entrada y salida constante de productos e insumos hace que los beneficios disminuyan considerablemente, e incluso pueden ser nulos a partir de cierto tiempo.