Finanzas
Cómo decidir los costos por servicios de limpieza de casas
El servicio de limpieza de casas o house cleaning es sumamente lucrativo, pero sus beneficios van más allá de la rentabilidad. Como siempre habrá alguien que necesite ayuda para limpiar sus espacios, tendrás la garantía de que tu clientela no desaparecerá.
Sin embargo, todas las ventajas que ofrece este tipo de empresa o labor por cuenta propia se desvanecen si no se calculan los costos adecuadamente.
Descubre cuáles son los conceptos que debes tomar en cuenta para la fijación de precios en este sector y multiplica tus ganancias.
#1 Materiales y mano de obra del servicio
La mano de obra es uno de los aspectos más importantes del cálculo de costos. Estima cuánto vale tu tiempo o haz un pequeño estudio de mercado para establecer un precio por hora atractivo para cada trabajador y monta tu propia empresa de servicios de limpieza doméstica.
¡No olvides tomar en cuenta los materiales y equipos que utilizarás en la limpieza! El costo del cloro, el detergente y otras sustancias que emplees debe estar presente en tu estructura de costos, pero también la amortización de la maquinaria y los equipos que usarás en el proceso.
Solo así podrás reemplazar tus aspiradoras y pulidoras por otras o pagar por un servicio de mantenimiento.
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#2 Haz una lista con los gastos generales
Toma en consideración todos los gastos que involucran la proveeduría del servicio. Esto te ayudará a evitar cualquier pérdida. Los gastos generales corresponden a aspectos como el pago del servicio telefónico, el transporte del personal, los implementos de limpieza, etc., es decir, todo lo esencial para que la empresa pueda realizar un trabajo eficiente.
Una vez que estés familiarizado con todos los gastos en los que incurres mes a mes, es hora de que los dividas en costos variables y costos fijos para calcular cuál es el costo total de la prestación de tus servicios.
Los costos fijos son aquellos que no varían en el tiempo, como el pago del alquiler del local donde tienes la oficina central. Los costos variables, en cambio, dependerán de tu volumen de trabajo.
Suma los costos fijos y los costos variables de un mes y esto te dará el costo total. Así podrás calcular con facilidad tus ganancias y precios.
Sigue leyendo: ¿Cuál es la diferencia entre costos fijos y variables?
#3 Calcula la utilidad bruta y el margen de beneficio
La misión de cualquier negocio es obtener una ganancia. Así que, una vez que tengas identificados tus costos fijos y variables, usa la información que has recolectado para calcular la utilidad y el margen de beneficio.
Veámoslo en un ejemplo:
Tienes una empresa de house cleaning y te gustaría saber las ganancias y el margen de beneficio de cada uno de los servicios que ofreces en el catálogo. Supongamos que comienzas con el servicio de limpieza de una oficina de 100 metros cuadrados. El costo variable -mano de obra, materiales, traslados- que implica prestar este servicio es de $30 y tú le cobras $45 a tus clientes.
Para calcular la ganancia bruta, resta el precio de venta a los costos variables, así:
Ganancia bruta = $45 - $30 = $15
Los $15 representan tu ganancia, beneficio o utilidad bruta. Una vez que conozcas este monto, podrás calcular el margen de beneficio bruto dividiendo la ganancia entre los costes variables y multiplicando el cociente por 100:
Margen de beneficio bruto = ( 15 / 30 ) x 100 = 50 %
Tu porcentaje de utilidad o beneficio bruto según el ejemplo es del 50 %. Cuando haya terminado el mes o el año, podrás calcular tu ganancia neta imputando los costos fijos a la ecuación. Toma en consideración que un margen de ganancia neta saludable para este negocio es del 20 %.
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#4 ¡No te olvides de los impuestos!
Si trabajas por cuenta propia y quieres saber qué impuestos te corresponde pagar, debes determinar si eres un autoempleado o empleado del hogar. Para hacerlo, el IRS recomienda que te hagas la siguiente pregunta: ¿Quién mantiene el control de la relación laboral?
Si tu clientela es la que decide cuándo vas a su casa a limpiar, las áreas de limpieza incluidas y, además, usas sus materiales, entonces eres un empleado del hogar. Si por el contrario, tú te encargas de llevar tus propios elemento de trabajo y limpias según lo establecido en un acuerdo previo, eres un autoempleado.
En el caso de que seas empleado del hogar, la familia contratante tiene que pagar impuestos y encargarse del seguro social o Medicare en caso de que ganes más de $2.100 al año en esa casa. Si caes en el perfil de autoempleado, debes llenar la forma 1099 y encargarte de algunos impuestos adicionales.
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#5 Ensaya, evalúa y vuelve a ensayar
Incluso si trabajas por tu cuenta, es importante que lleves un registro con todas tus ganancias y gastos. Si montaste tu propia empresa de house cleaning, recuerda apoyarte en los libros contables y hacer análisis financieros -al menos- cada año para saber cómo va tu negocio.
¿Un dato final? Mantén tus ojos puestos en la competencia. Evalúa qué precios tienen, qué servicios ofrecen y cómo consiguen a su clientela para que te familiarices más con el mercado. La mejor forma de hacerlo es que calcules el precio por hora que cobran las empresas del sector y lo compares con los tuyos.
Así tendrás una idea de la oferta y la demanda del ramo de los servicios de limpieza de casas.