Contabilización de contratos de construcción

Los proyectos de construcción pueden tardar varios períodos contables antes de ser completados. La constructora entra en un contrato con el cliente, que define cuando la empresa constructora espera terminar el proyecto y cuando el cliente va a hacer los pagos. Normalmente, los pagos se producen durante todo el curso del contrato. Las empresas de construcción utilizan dos métodos de contabilización de estos contratos. Ellos son el grado de avance y el método de contrato terminado.

El grado de avance reconoce una parte de los ingresos y gastos durante toda la duración del contrato. La empresa de construcción determina el monto de los ingresos y los gastos deben reconocerse con base en el porcentaje de trabajo completado.

A medida que el trabajo avanza en el contrato, los gastos incurridos en relación con el contrato se cargan en una cuenta denominada costos del contrato. El dinero se acredita por el importe de estos gastos.

Cuando la empresa factura al cliente, registra un débito a las cuentas por cobrar y un crédito para el progreso de la facturación. Los pagos recibidos del cliente se registran con cargo a dinero en efectivo y un crédito a las cuentas por cobrar.

Al final del período, el contador ajusta la cuenta de facturación de progreso para determinar los ingresos obtenidos durante el período. El contador determina qué porcentaje del contrato se ha completado y se multiplica por la cantidad de veces del total de todos los pagos que el cliente tendrá que realizar. El contador registra una entrada de diario debitando el progreso de cobros y acreditando los ingresos de contrato por el importe de los ingresos obtenidos de ese período.

En la cuenta de resultados, se registra el ingreso contable de contratos como ingresos y costos del contrato como un gasto.

El método de contrato terminado requiere que ningún ingreso se reconozca hasta que se termine el contrato. Este método se utiliza cuando hay duda sobre si el cliente pagará el contrato en su totalidad.

A medida que el trabajo avanza en el contrato, los gastos incurridos en relación con ese contrato se cargan en una cuenta denominada construcción en progreso. El dinero se acredita por el importe de estos gastos.

Cuando la empresa factura al cliente, registra un débito a las cuentas por cobrar y un crédito para el progreso de facturación. Los pagos recibidos del cliente se registran con cargo a dinero en efectivo y un crédito a las cuentas por cobrar.

A la finalización del proyecto, la empresa registra los ingresos y gastos relacionados con el proyecto. La compañía debita el progreso de los cobros y créditos de Impuestos de Construcción en el saldo de esta cuenta. La compañía también adeuda los gastos de construcción y créditos de construcción en progreso para el saldo de esta cuenta.

En la cuenta de resultados, el contador registra los Ingresos de Construcción como ingresos y los Gastos de Construcción como un gasto. de construcción como los ingresos y gastos de construcción como un gasto.