¿Puedo cobrar un cheque si mi nombre está mal escrito?

La creatividad es una cualidad intrínseca en la naturaleza humana, y la misma se pone de manifiesto de diversas maneras, siendo una de ellas la colocación de nombres a los recién nacidos. En tal sentido, no es difícil encontrarse con nombres poco comunes acompañados de apellidos también un tanto singulares. Aunque esta disposición creativa puede ser celebrada por algunos padres, se trata de una práctica que puede plantear un problema para la criatura que recibió el nombre tan peculiar, especialmente cuando ya en edad adecuada le corresponda hacer efectivo un cheque, pudiendo ser usual que su nombre en el cheque esté mal escrito.

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Aunque los cheques estén cayendo en desuso, especialmente debido a la facilidad y agilidad con que se llevan a cabo actualmente las transferencias electrónicas, todavía son utilizados como herramientas o medio de pago, especialmente por parte de las empresas que necesitan o requieren de un soporte físico de pago, además de que resulta imprescindible cuando se necesita obtener o manejar dinero en efectivo en grandes cantidades.

No obstante, como este medio de pago es como un formulario que se llena generalmente en forma manual está sujeta a la perpetración de errores que podrían anularlo.

En primer lugar, el error más común es escribir mal el nombre del beneficiario, ya sea porque se colocó una letra de más, se omitió alguna o se colocó donde no va. Un ejemplo típico puede verse en el caso del nombre Johnny, porque también puede ser Jhonny y hasta Jonni.

También es posible que se cometan errores en la escritura del monto del dinero, el cual debe ser expresado en letras y números, pasando a veces que estos no coinciden.

Por último, se tiene que el emisor del cheque puede errar la fecha colocando un número equivocado de mes o del año, lo que además podría generar un cheque con fecha futura, es decir, un cheque postdatado, lo cual es ilegal en muchos países.

Todos los anteriores son errores que puede cometer el propietario del cheque, pero también el beneficiario puede cometer errores como, por ejemplo, un mal endoso.

No obstante, aunque la persona tenga un nombre común, también puede ocurrir que por apuro, descuido, movimiento involuntario o falta de habilidad para escribir, el nombre en el cheque haya sido escrito incorrectamente. De allí que, siendo una práctica que se va haciendo común, más en la medida que surgen nuevos nombres casi impronunciables, ya la mayoría de los bancos disponen de mecanismos que permiten solventar esta incómoda situación.

Las instituciones bancarias han fijado una serie de parámetros para dar validez a los cheques que reciben con errores en el nombre del portador.

Uno de los pasos requeridos para que puedas validar un cheque donde pusieron mal tu nombre es probar la intención del emisor. En este sentido, si puedes mostrar o consignar un documento de identificación (DNI, Pasaporte…) donde pueda apreciarse que la escritura obedece a una falta de ortografía o la omisión de una letra, probablemente no haya problemas en demostrar que el cheque efectivamente está dirigido a ti.

Otro procedimiento aceptado por muchos bancos es el reconocimiento del error mediante un endoso doble por parte del portador del cheque. De allí que deberás colocar al reverso del cheque tu nombre como lo escribió el emisor, y en la línea siguiente deberás colocar nuevamente tu nombre pero como realmente se escribe, acompañado de tu firma. Este procedimiento hará posible que puedas cobrar o depositar el cheque.

Si aún todavía no existe seguridad por parte del banco del que el cheque haya sido girado a tu favor, los procedimientos que siguen demoran un poco más pero son concluyentes.

Un procedimiento ante la no confirmación del nombre en el cheque, es la retención del cheque hasta que la institución bancaria pueda ponerse en contacto con la persona o empresa titular de la cuenta con los fondos que cubrirán el cheque. En algunos casos se trata de una retención temporal y basta una llamada telefónica para darle curso al proceso de cobro o depósito.

Otras veces el banco anula el cheque y opta por enviarlo a la persona o empresa titular para su destrucción y emisión de un nuevo cheque. Este procedimiento se produce cuando hay sospechas de que ha habido forjamiento del cheque, por ejemplo, se ha repasado un carácter evidenciándose un trazo con mayor grosor o se ha escrito con tinta diferente parte de la escritura. De allí que se recomienda que aun cuando se note que se ha escrito un cheque con tinta casi que invisible se resista la tentación de repasar los caracteres.

Otro elemento que considera el banco ante los nombres mal escrito en este medio de pago es la frecuencia con que ocurre este error. También ayuda el hecho de que el beneficiario tenga una cuenta en dicho banco y cuente con un buen historial. En este caso se recomienda que el cheque sea depositado en lugar de intentar hacerlo efectivo.

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