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Cómo sacar licencia para cuidar ancianos
Uno de los negocios que mayor crecimiento ha tenido en los países desarrollados en la última década es la del cuidado de adultos mayores.
El continuo envejecimiento de la población, unido a una mayor expectativa de vida, ha favorecido la aparición de miles de guarderías para adultos mayores en todo el mundo.
A esto se une una mayor exigencia en cuanto a la calidad de los servicios, confort y atención por parte de los clientes y sus familias, que esperan que sus abuelos y padres en edad avanzada pasen en excelentes condiciones la última etapa de su vida.
Las guarderías para adultos mayores, asilos o casas de retiro permiten a las familias descansar del cuidado permanente que exige un pariente en edad avanzada, sobre todo si sufre de algún tipo de dolencia degenerativa.
Además, estos lugares pueden ofrecer diversos servicios como terapias físicas, alimentación, recreación y seguimiento médico, que no todas las familias están capacitadas para realizar.
En el caso de Estados Unidos, existen programas basados en Medicare y Medicaid, que utilizando fondos privados, dan oportunidades a cientos de miles de adultos mayores de recibir cuidado sanitario y apoyo social.
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¿Por qué es un buen negocio abrir un centro de atención de adultos mayores?
La demanda de servicios de atención a la vejez es la mayor razón que justifica el abrir un centro de atención de adultos mayores como forma de negocio.
La población mundial está envejeciendo mientras que en muchos países baja la tasa de natalidad.
En los países más desarrollados es normal que hombres y mujeres vivan hasta los 70 y 90 años.
Sin embargo, vivir más no significa vivir mejor. Gran porcentaje de los adultos de mayor edad sufren enfermedades o discapacidades que requieren ayuda externa permanente.
Al tener cada vez menos hijos, muchas personas llegan a la vejez sin un grupo familiar suficientemente amplio para repartirse la responsabilidad de su cuidado.
A esto se une que la dinámica social y económica actual hace que los adolescentes y adultos jóvenes se dediquen más a sus estudios y trabajo y no tengan tiempo, conocimientos o paciencia para cuidar de los ancianos de la familia.
La necesidad de este tipo de servicios es una gran oportunidad para que inicies tu emprendimiento. Vamos a analizar cómo podrías abrir una guardería para adultos mayores.
¿Cuáles son los tipos de guarderías para adultos mayores?
Hay varias formas de ofrecer servicios de cuidado de adultos mayores:
1.- Cuidador a domicilio
Es el negocio más sencillo de iniciar y el más rápido para conseguir clientes. Según un horario y precio acordados con la familia, irás a casa del adulto mayor para cuidarlo.
Deberás prestar asistencia en su alimentación, aseo y administración de medicinas prescritas.
La conversación y el buen trato son indispensables, así como también que tengas conocimientos de enfermería y primeros auxilios.
Como desventaja, los ingresos son reducidos o pueden estar legalmente limitadas a un monto por cliente. Por esta razón, debes atender más clientes al día si quieres ganar más dinero.
2.- Agencia de cuidadores de adultos mayores
Opera como agencia de empleos donde solo contratarás cuidadores de adultos mayores que serán asignados a los clientes que lo soliciten.
Tu función será la de un empleador, por lo que debes escoger enfermeros graduados y negociar con ellos el monto de su pago, beneficios y otros aportes.
Tu trabajo será conseguir clientes para la agencia y promover los diferentes tipos de servicios y horarios en los que estarán disponibles tus cuidadores.
En general, la ganancia dependerá del número de familias que te contraten y de cuántos cuidadores trabajen para ti.
3.- Residencia para adultos mayores
Este es el negocio más tradicional y que más se apega a la denominación de guardería de adultos mayores.
El concepto es habilitar una residencia en la que atenderás diariamente a un determinado número de adultos, de manera similar a como funcionan las guarderías de niños.
Esto significa que trabajarás según horario desde la mañana al final de la tarde, de lunes a viernes o incluso fines de semana.
Si tu modelo de negocio es más ambicioso y tienes la infraestructura necesaria, puedes abrir un hogar familiar para ancianos, con servicio de alojamiento permanente.
Este tipo de negocios son los conocidos popularmente como centros geriátricos, vivienda para adultos mayores o casas-hogar de ancianos.
En este caso los requerimientos son mayores que los dos modelos anteriores. Se necesita un espacio mucho más grande para recibir a los adultos, preferiblemente con varios salones para las actividades de los adultos mayores.
Esto incluye recreación, alimentación, áreas para ejercicios o terapias físicas, habitaciones individuales y varias salas sanitarias.
Si no posees una casa adecuada tendrás que alquilarla y tramitar permisos especiales ante las autoridades de salud, municipalidad, servicios sociales locales o estatales.
También deberás contar con un equipo de cuidadores entrenados y certificados, así como personal de limpieza y de seguridad.
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Pasos para abrir una guardería para adultos mayores
Una vez decidido el modelo de tu negocio, puedes empezar a dar forma a tu guardería tomando en cuenta las siguientes condiciones:
a) Licencias:
En la mayoría de los países occidentales se requieren licencias para operar guarderías para adultos mayores.
En Estados Unidos y muchos países latinoamericanos se requiere un permiso comercial por parte de la autoridad local de la ciudad donde vaya a funcionar la guardería de adultos mayores.
También se debe tener un permiso otorgado por la autoridad social o autoridad responsable de la salud de ancianos, que además realizará inspecciones regulares de cada guardería.
A esto se une el requerimiento de permisos del departamento de salud, tanto para la atención médica como para la preparación y manejo de los alimentos que se ofrecen a los residentes de la guardería de adultos mayores.
En Latinoamérica la casi totalidad de países tienen leyes nacionales que regulan esta actividad en todo su territorio, pero Estados Unidos cada condado y estado posee sus propias reglas y licencias que debes pagar.
Por esta razón, en EEUU es importante que acudas a tus autoridades locales para solicitar información sobre estas normativas.
b) Establece un horario
Las guarderías de adultos mayores deben laborar en horarios convenientes a las familias de sus clientes. Por regla general el horario más usado es de 7 de la mañana a 6 de la tarde, de lunes a viernes.
Este horario facilita a las familias de clase trabajadora el cuidado de sus ancianos mientras cumplen su jornada laboral.
También puedes extender el horario a los sábados o domingos, con un costo adicional.
La última opción es a tiempo completo, donde el horario debe incluir un día u hora para la visita de los familiares.
c) Crea un manual de políticas y procedimientos
Trabajar con adultos mayores implica la mayoría de las veces lidiar con necesidades especiales debido a problemas de salud originados en su edad.
Los adultos mayores pueden manifestar resistencia a seguir instrucciones de sus cuidadores o negarse totalmente a colaborar con su aseo y alimentación.
Si quieres abrir una guardería para adultos mayores tienes que crear un manual de procedimientos y políticas de comportamiento para todo el personal que contrates.
Este manual debe señalar las condiciones y comportamiento a seguir para dar un ambiente seguro y confortable a los adultos mayores.
Es importante además que cada empleado se comprometa por escrito a cumplir estas reglamentaciones y políticas, so pena de despido o acciones legales en su contra.
d) Selecciona el personal
Quienes trabajan con personas enfermas o con discapacidad, como es el caso de la mayoría de adultos mayores, deben tener conocimientos médicos y preparación psicológica adecuada.
Escoge solo empleados con experiencia o formación, pero sin importar lo excelente que parezca esta, revisa sus antecedentes laborales y personales.
e) Implementa sistemas de seguridad
La instalación de sistemas de videocámaras en tus instalaciones permitirá detectar abusos o faltas por parte del personal, así como también de parte de los clientes.
Además te dará protección a la hora de robos y ataques externos a tus instalaciones.
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Contrata también un abogado experto en el área de la praxis médica, para cuidar tus intereses si surge un problema con la salud o atención a un adulto mayor.
Esto debe ir acompañado de un seguro contra malas prácticas médicas y otro seguro contra daños a tus instalaciones o daños personales a tus clientes o empleados.
f) Promueve tus servicios
Una vez registrado tu negocio ante la autoridad local responsable de los adultos mayores y las asociaciones de atención al anciano debes empezar a promocionarlo.
El envío de folletos a hospitales y médicos explicando tus servicios, precios y números de contacto es el primer paso para darte a conocer.
Usa el internet y las redes sociales para ofrecer información a potenciales clientes sobre tus servicios.
A través de internet y las redes, puedes mostrar fotografías o vídeos de tus instalaciones, tu personal y las actividades y atenciones que ofreces a los adultos mayores bajo tu cuidado.